¿Sabes que tienes que hacer para que la soledad no moleste? hacerte amigo de ella. Tratarla en grande, como que es necesaria porque a todos nos llega, tarde o temprano y si la tratas bien te llevas muy bien con ella y cuando uno quiere acordar, silenciosamente… se empieza a ir…
Ojalá que este comienzo continúe en el sentido que he llegado por este medio porque me pareció una original y necesaria idea.
Yo aprendí que la soledad es más común de lo que parece, pasa que a algunos la siente más, le dan más importancia y es allí cuando ella se fija más en ese ser, en ese corazón, en esa alma y cuerpo y lo toma para sí más tiempo. Yo me despegué de ella de fáciles maneras: caminando, cantando, oyendo música o programas inteligentes sin mucho que pensar. Cuando quise acordar me di cuenta que desaparecía de mi vida: aunque siempre está en la esquina… como esperándome. Pero no hay que tenerle miedo, hay que enfrentarla y lo más probable que cuando te vea a los ojos, de frente y mano salga corriendo justamente porque la enfrentaste.
Y cuanto más seguido lo hagas se acabara yendo sin presentarse porque se dará cuenta que saliste vencedor.
Y en esas mismas esquinas te encontrarás con alguien, tal vez, que quieras ayudar o que necesite tu gesto también y allí ya sabrás que decirle porque a veces las canciones erran su propósito: la soledad no es un amigo que se va, la soledad es un enemigo que siempre vuelve y lo bueno de saberlo es que uno lucha con las mejores armas: una sonrisa, una guiñada y diciéndole: puedes quedarte si quieres, porque ¿sabes? con mi compañía te sentirás menos sola…
Your content goes here. Edit or remove this text inline or in the module Content settings. You can also style every aspect of this content in the module Design settings and even apply custom CSS to this text in the module Advanced settings.