Cada dedo está conformado por 2 o 3 huesos pequeños. Estos huesos son frágiles y por lo tanto se pueden romper después de golpearse o dejar caer algo pesado sobre el pie.
Los dedos rotos son una lesión común. La fractura casi siempre se trata sin cirugía y se puede atender en la casa.
Las lesiones graves incluyen:
- Rupturas que causan la torsión del dedo del pie
- Rupturas que causan una herida abierta
- Lesiones que comprometen el dedo gordo del pie
- Si tiene una lesión grave, debe buscar ayuda médica.
Las lesiones que comprometen el dedo gordo pueden necesitar un yeso o férula para sanar. En casos poco frecuentes, se pueden desprender pequeños trozos de hueso e impedir que el mismo sane adecuadamente. En este caso, se puede necesitar cirugía.
Síntomas:
- Dolor
- Hinchazón
- Hematomas que pueden durar hasta 2 semanas
- Rigidez
Cómo aliviar los síntomas:
- Suspender cualquier actividad física que cause dolor y mantené tu pie inmóvil siempre que sea posible.
- Colocar hielo en el dedo del pie por 20 minutos cada hora que estés despierto durante las primeras 24 horas; luego, de 2 a 3 veces al día. (No aplicar hielo directamente sobre la piel).
- Mantené el pie levantado para ayudar a reducir la hinchazón.
- Consultá a un médico por analgésicos para el dolor.
- Aumentá lentamente la distancia que caminás cada día. Podés retornar a tu actividad normal una vez que hayas bajado la hinchazón, y puedas usar un zapato estable y protector.