Las várices son venas hinchadas a causa de una acumulación anormal de sangre debido a la debilidad, a menudo heredada, en las paredes y válvulas de las venas superficiales. Esto hace que las venas se ensanchen y se dilaten, de manera que la sangre se acumula fácilmente cuando una persona permanece de pie durante mucho tiempo.
Para muchas personas, son simplemente un problema estético. Para otras personas, las venas varicosas pueden causar dolor y malestar. A veces, las venas varicosas causan problemas más graves.
Síntomas más comunes:
- Pesadez de piernas.
- Aparición de varices con venas visibles.
- Edema.
- Hinchazón.
- Aparición de dolor.
- Calambres.
Factores de riesgo:
- Edad. El envejecimiento causa un desgaste natural de las válvulas en las venas que ayudan a controlar el flujo sanguíneo. Con el tiempo, ese desgaste hace que las válvulas permitan que la sangre regrese a las venas, donde se acumula.
- Sexo. Las mujeres tienen más probabilidades de padecer la enfermedad.
- Embarazo. Durante embarazo, el volumen sanguíneo del cuerpo aumenta. Este cambio contribuye al desarrollo del bebé, pero también puede agrandar las venas de las piernas.
- Antecedentes familiares. Si otros familiares tuvieron venas varicosas, existe una mayor probabilidad de que también las tengas.
- Obesidad. Tener sobrepeso ejerce presión adicional en las venas.
- Estar de pie o sentado durante períodos prolongados. El movimiento ayuda a que la sangre circule.
¿Cómo prevenirlas?
- Evitar los tacos altos y medias ajustadas.
- Cambiar regularmente la posición de sentado o de pie.
- Seguir una dieta rica en fibras y con bajo contenido de sal.
- Hacer ejercicio.
- Levantar las piernas cuando estés sentado o acostado.
- Controlar el peso.