¿Nos vamos de vacaciones? Si estás planeando unos días de descanso y relax, visitar un lugar nuevo, irte para la playa, o para donde sea, te damos una mano con los preparativos.
Claro que la valija lleva su tiempo armar. Dependiendo el destino vas a elegir las prendas a llevar, alguna ropa liviana si hace calor, ropa abrigada si hace frío, alguna prenda para estrenar, tu set de cremas, necessaire para el baño, además de cargadores para el celular y todas las cosas que no podés olvidar.
Pero, para poder disfrutar con tranquilidad y disfrutar al máximo sin preocupaciones, hay un ítem más para agregar en la valija. ¡Un botiquín de viaje! Y a continuación te dejamos algunos consejos para armarlo.
En primer lugar, elegir un bolsito, necessaire, o lo que tengas, pero que sea cómodo y seguro de llevar.
1 – Vendas.
Vendas, tiritas, curitas, unas tijeritas y agua oxigenada no pueden faltar en un kit médico de vacaciones. Sobre todo, si viajás con niños.
2 – Analgésicos.
Llevá contigo los analgésicos que te haya indicado tu médico/a de confianza, por si sucede que te duele la cabeza o te sea necesario tomarlos.
3 – Protectores estomacales.
El estómago es una de las partes de nuestro cuerpo que más sufre en un viaje. Muchas veces tendemos a comer de más y llevar una dieta un poco distinta de la que seguimos en casa. Consultá con tu médico/a sobre qué protectores podés llevar y te informe sobre su uso.
4 – Protector solar.
No importa la época del año, siempre que estamos al aire libre necesitamos estar protegidos del sol. Y, como en tus vacaciones probablemente estés más tiempo afuera disfrutando, es necesario cuidarte correctamente.
5 – Repelente de mosquitos.
Llevá contigo un aerosol de repelente o una crema para evitar las picaduras molestas. ¡Más aún si sos alérgico/a!
6 – Antialérgicos.
Ya que mencionamos, si sufrís de alergias, llevá tus antialérgicos recetados siempre contigo.
7 – Termómetro.
Esto está especialmente pensado para los que son padres. Sobre todo, cuando los niños son muy pequeños.
8 – Tus medicamentos.
En caso de que tengas que seguir un tratamiento, no olvides llevar tus medicamentos contigo.